Sobre deportes y amistades

Desde hace tiempo se ha puesto de moda el hablar de cómo e necesario llevar una vida sana, en la que se ejercite el cuerpo. Pues bien, a pesar de que suena un poco cansón el discursito, la verdad es que en muchas ocasiones el hacer deporte es uno de los planes más fáciles y gratis de Bogotá.

Si usted es un deportista de alto rango, o entre sus amigos es reconocido como una persona inquieta y aficionada a los deportes y la actividad física, recuerde que el Instituto Distrital de Recreación y Deporte tiene una serie de actividades planeadas para usted, entre las que se cuenta el ingresar a algún equipo del deporte de su preferencia para competir a nivel semi-profesional.

Pero si usted no le jala a eso, y no tiene con qué movilizarse por la ciudad (ni carro, moto, ni para la tarjeta de transmilenio… y fijo, fijo, ni para el ‘linche’ del bus), aquí le proponemos otras ideas:

En todo barrio bogotano hay canchas, o al menos, vestigios de canchas todavía utilizables.

Salir a jugar 'banquitas' es uno de los planes más baratos y populares

Desde chanchas de fútbol, o lo que queda de ellas después de haber sido destrozadas por generaciones enteras de vecinos, hasta aros de básquet de diferentes alturas, lo más importante es pasar un buen rato ejercitando el cuerpo, respirando aire puro (o lo que queda de él en la capital) y conociendo nuevas personas, si se hace bien.

Cada barrio tiene su cancha de básquet/fútbol. Si no la conoce, un posible plan es buscarla.

Así como están los juegos que necesitan muchos jugadores, también es verdad que simplemente salir a lanzar el balón o a hacerse pases entre dos es una práctica nada ridícula. Pero si para usted se siente así, recuerde que también hay otros escenarios deportivos para dos: tennis, squash, o simplemente salir a camina por el barrio o trotar durante cierta cantidad de tiempo definida.

Esta es una cancha de tennis, pero recuerde que su equivalente, el squash, se puede jugar contra un muro adecuadamente pintado.

En caso de que usted llegue y las canchas ya estén ocupadas, no lo tome como un obstáculo. Ser un observador también tiene sus beneficios: conocer gente e integrarse a un grupo (el ‘dueño’ de la cancha) ayuda a conocer más personas, y de esa manera, ampliar los círculos sociales que pueden, eventualmente, rescatarlo de su despache.

Fuente: galería personal

Las tribunas están allí precisamente porque se sabe que hay quienes disfrutan ver los deportes.

También así lo ve Catalina Rubiano, estudiante universitaria que cuenta que a la hora de buscar un plan barato, llama a sus amigos a ver quién le ‘sale con algo’. Cuantos más conocidos, más posibilidades de plan, dice la ley de probabilidad. Los planes incluso pueden incluir que sus amigos le gasten algo, por las ganas tan tremendas que tienen de verse con ud, o le presten plata, o simplemente sea cuestión de ir a visitarlos y jugar pin-pon (o ‘tenis de mesa’ como le dicen algunos). Recuerde que hay conjuntos de vivienda donde estos se pueden alquilar, o asociaciones comunitarias.

Fuente: Archivo personal

Catalina aprovecha sus contactos para que la saquen del aburrimiento. Lo peor que puede pasar, es que el plan se convierta en actualizar cuaderno con viejos amigos.

Por último, otro plan gratis, y saludable, es ayudar con la cultura del reciclaje en la ciudad. Si tiene una tarde libre, asegúrese que en su casa y en su conjunto se estén utilizando mecanismos para ayudar al reciclaje: diferentes canecas, saber cuando pasan los recicladores… todo eso ayuda a generar una mejor ciudad y a lucirse entre sus amigos por ser ‘eco-responsable’ 😉

Fuente: archivo personal

Estas categorías son las más populares para la división de la basura: orgánicos, metal, plásticos, vidrio y papel

Fuera de desparchados, incoherentes

Mucho se está hablando en Colombia de fútbol (por aquello de ser la sede del Mundial Sub-20) , no creo que tanto como se está hablando del incidente con el director técnico del equipo colombiano, el llamado ‘Bolillo’ Gómez.

Hay mucho que opinar al respecto, pero por favor infórmese sobre las respuestas al incidente en otro lado, que no me gusta repetir. Lo que sí me gusta hacer es señalar cosas que creo que otros no han notado, como el hecho de que directa o indirectamente se le acusa al ‘Bolillo’ de discriminación y violencia contra las mujeres, y de ahí nace todo el escándalo. Eso no es lo nuevo.

Lo que me deja pensando es si acaso si hubiese sido contra hombre, la reacción de los medios sería igual de atenta. Y me quedo pensando que no, teniendo en cuenta que las cosas que se deben decir entre equipos, en medio de un partido, no necesariamente son las mas educadas y pomposas.

Foto tomada de http://www.perfil.com/contenidos/2008/07/26/noticia_0045.html

¿Por qué el tema no tendría la misma importancia si hubiese sido un golpe entre hombres? ¿De dónde nace esa idea de que si se le pega a una mujer es más grave que pegarle a un hombre? ¿Es acaso porque en principio, el argumento es que las mujeres son más débiles, y por eso es más grave? (De la misma manera en que se justificaría el repudio a la violencia infantil)…

¿Discriminación anti-discriminativa? ¿Cómo es la cosa?

¿A nadie le suena esto raro? Se supone que el lío es porque el señor atenta contra una mujer, y que eso es discriminatorio y violento. el argumento lógico, entonces, es que de otro modo no sería discriminación, o no sería tan grave. Me pregunto si esa no es una manera de discriminar también. Además viene oculta la idea de que en principio la mujer empieza con desventaja.

Frente a eso, los comentarios de la Senadora Liliana Rendón tienen todo el sentido. Las mismas preguntas se harían si fuera un hombre, así que ¿por qué no? ¿Por qué todo el mundo asume que la ‘pobre’ mujer no se lo merecía?

Ay país, y tus incoherencias

No me tomen a mal: no creo que sí se lo mereciese. Lo que sí creo es que NADIE merece que lo cojan a golpes, o lo agredan, por tener una diferencia de opiniones. Pero si hay alguien que sí cree que frente a una disputa la mejor manera de solucionarlo es ‘Darle en la cara, marica‘ (Como nos enseña uno de los ex-presidentes más queridos por el pueblo colombiano) entonces, pues ‘denle en la cara’ a todos, y el no hacerlo con unos, es discriminarlos…

¿O es que de repente los colombianos tenemos un código de honor para los duelos, (al mejor estilo medieval) en el que nos metemos con uno de nuestro propio tamaño?

En ese caso… ¿no hay algunas mujeres más grandes que los hombres (en todo sentido, pero limitémonos a los físicos) y que en ocasiones abusan de los hombres?